El respeto por el medio ambiente y el máximo aprovechamiento de los recursos naturales se han convertido en dos tendencias en auge en la mayor parte de los sectores, y el de la construcción no podía ser menos. 

Para dar cabida a estas ideas, han surgido diversos conceptos que tienen precisamente por objetivo tratar de adaptar las viviendas a los lugares en los cuales se realizan, siendo uno de ellos el de arquitectura bioclimática.

Pero ¿en qué consiste la arquitectura bioclimática? ¿Cuáles son sus principios? ¿Es lo mismo la arquitectura sostenible que la arquitectura bioclimática? En este post vamos a hablar largo y tendido sobre estas cuestiones, así que te recomendamos que continúes leyendo. 

¿Qué es la arquitectura bioclimática y por qué es importante?

Antes de entrar a conocer con mayor profundidad los principios que rigen este tipo de arquitectura, es fundamental que conozcamos en detalle en qué consiste.

Básicamente, la construcción bioclimática se basa en el diseño de edificios teniendo en cuenta las condiciones climatológicas del sitio en el cual van a realizarse, algo que nos permite aprovechar al máximo ciertos recursos como el sol, la lluvia, etc.

Esto nos va a permitir, entre otras cosas, reducir el impacto medioambiental de los mismos a la par que su consumo energético, algo que repercute también de manera positiva en el bolsillo de los consumidores. 

Principios de la arquitectura bioclimática y el diseño 

Como acabamos de ver, el diseño de este tipo de viviendas busca lograr la máxima eficiencia con una inversión mínima y sin provocar daños en el medio ambiente, lo que hace que este tipo de edificaciones deban cumplir una serie de principios. Estos son: 

• Diseño arquitectónico adaptado a los factores ambientales característicos de la zona, como la humedad o la temperatura.
• Importancia de la orientación de la vivienda. Es necesario situarla de manera que podamos aprovechar lo máximo posible la luz natural, el sol, etc. En este sentido la mejor orientación de la vivienda suele ser la que se adapta a las necesidades del entorno.
• Adaptación a la temperatura. En este aspecto, además de la orientación, también se tienen en cuenta aspectos como la ventilación cruzada, la protección solar y, por supuesto, el correcto aislamiento de la vivienda. 
• Uso limitado de acondicionamientos artificiales. Estos solamente pueden ser utilizados en condiciones extremas y siempre tienen que servir de apoyo a las medidas que se hayan establecido previamente mediante un diseño bioclimático.

Beneficios de la arquitectura bioclimática

En resumidas cuentas, la arquitectura bioclimática nos ayuda a aprovechar al máximo los recursos naturales de la zona en la cual estemos llevando a cabo la construcción de un edificio, teniendo en cuenta también el diseño previo del mismo.

Esto tiene una serie de ventajas o beneficios que vamos a ver en detalle a continuación:

• Incremento del confort de la vivienda. El correcto diseño de este tipo de viviendas nos ayuda a conseguir unas óptimas condiciones higrotérmicas, lo que implica una mejor calidad del aire, iluminación, etc.
• Mayor cuidado de la salud. Este tipo de construcciones eliminan el síndrome del edificio enfermo, el cual puede terminar provocando diversos tipos de enfermedades en aquellas personas que habitan en la vivienda.
• Reducción de las emisiones de CO₂. Otro aspecto que es importante destacar, es el hecho de que estos edificios nos ayudan a reducir los gases nocivos que provocan el calentamiento global, cuidando en mayor medida nuestro planeta. Además, también se minimizan los residuos y se incrementa la biodiversidad. 
• Son edificaciones más económicas. Aunque pudiera parecer lo contrario, lo cierto es que realizar este tipo de construcciones es más barato porque conlleva un mejor aprovechamiento de los recursos. Además, se limitan las instalaciones de otros sistemas de calefacción y refrigeración, con el consecuente ahorro que esto puede suponer. 
• Menor consumo energético. De media, un edificio bioclimatico consumo un 50 % menos de energía que uno convencional, lo que afecta de manera directa al bolsillo de los consumidores al reducir el importe de sus facturas de energía. 

En resumidas cuentas, toda una serie de características beneficiosas que están convirtiendo a la arquitectura bioclimática en la mejor alternativa de futuro.

Conclusiones

El diseño de edificios basado en una arquitectura bioclimática se ha convertido en una de las claves para reducir el impacto medioambiental de la construcción, además de tener otra serie de ventajas sumamente interesantes.

Esperamos que este artículo te haya servido para conocerlo con mayor detalle y entender su importancia hoy en día.