Ante un mercado tan cambiante como es el inmobiliario, y más si hablamos del segmento residencial, era de esperar que la transformación de los modelos de vida residencial no tardase en llegar. Nos encontramos inmersos en plena explosión del sector en España, los consumidores han virado sus preferencias hacia el alquiler, que ya no se mira desde el mismo prisma que sucedía hace 20 años, ni tan siquiera como hace 10.
El número de inquilinos crece exponencialmente y esta demanda no está siendo cubierta como merece. Durante la década de 2010 a 2020 el porcentaje de población que vive de alquiler en nuestro país ha pasado del 20,2 % al 24,9 %. Aunque lejos de cifras europeas, España se está postulando como un nuevo eje donde el alquiler se está convirtiendo en una opción no solo para el corto plazo o temporal. Además, ya no se espera la tipología tradicional de vivienda para arrendar.
La nueva demanda de vivienda en alquiler viene marcada por jóvenes que buscan un hogar con buenas calidades, máximas prestaciones, cercanía, óptimas comunicaciones, sostenibilidad y criterios ESG, y que a la vez les permita contar con independencia y espacio suficiente para desarrollar su día a día.
¿Cómo se ha llegado hasta aquí? ¿Qué se espera hoy en día de una vivienda en alquiler?
¿Qué le ha pasado al mercado del alquiler?
Bajo las necesidades de la población y los cambios sociológicos importantes, sucede que desde la crisis de 2008 se está experimentando un auge destacado en el modelo residencial del alquiler por dos motivos principales:
- Las restricciones bancarias para acceder a una hipoteca. La crisis económica cerró la financiación a particulares para la adquisición de una vivienda en propiedad, lo que avocó a la población a dirigirse hacia el modelo de alquiler.
- El cambio en la mentalidad. La globalización, y el intercambio cultural con los países del entorno, han hecho que el residente español tenga cada vez menos mentalidad de propietario. Seguimos en un país de propietarios, pero cada vez un porcentaje mayor prefiere vivir —por voluntad propia (no por obligación o necesidad)— de alquiler.
Sobre todo, por los cambios en la sociedad, los encargados de poner en el mercado producto en alquiler han abierto sus puertas a formatos que piensan en el nuevo perfil de inquilino.
Como ya hemos mencionado, el nuevo inquilino espera encontrar un lugar donde quedarse a largo plazo, donde siente ese hogar como si fuese suyo, sin alejarse de la ciudad y pensando en el medio ambiente. Asimismo, huye del modelo fast, por lo que aspira a un diseño propio con arquitectura de vanguardia. Los espacios comunes y al aire libre son también elementos relevantes a la hora de elegir una vivienda en alquiler. En definitiva, hoy en día lo que se busca es un nuevo concepto que ya se está abriendo paso en la capital: bienvenidos a Bext Space.
La nueva fórmula de alquiler de Bext Space
Fruto de escuchar lo que la nueva demanda quiere y busca en una vivienda en alquiler, desde Bext Space ofrecemos un formato que otorga un nuevo horizonte.
En una de las zonas que va a experimentar una enorme regeneración urbana, ahí es donde se va a levantar Bext Space. Un edificio que aportará una visión panorámica de la ciudad con vistas tanto a la misma como a la sierra de Madrid. Abrazado de zonas verdes y con un interior de vanguardia con una arquitectura integrada con la naturaleza, Bext Space entrega a Madrid apartamentos que serán iconos de referencia.
Las últimas tendencias de diseño estarán presentes y con ellas, la sostenibilidad. La construcción sostenible se traduce en lo que es Bext Space.
A su vez, vivir en Bext Space dará a sus residentes todos los servicios propios de un hotel. Y junto a los servicios, las zonas comunes se compondrán de todo lo necesario para una nueva forma de vivir llena de confort, a la altura de lo que el inquilino Bext Space espera y se merece.
Entra en el universo Bext Space y empieza a disfrutar de su nueva forma de vivir de alquiler.
